Alpine A106 (1955)
El origen del A106 debemos buscarlo en la competición, concretamente en el piloto Jean Redelé, quien habia participado en numerosas carreas con un Renault 4, pero a su pesar, se trataba de un coche demasiado pesado y con una aerodinámica pobre. Por ello Redelé se puso a trabajar en un pequeño deportivo francés, este fue el Alpine A106.
Se basaba en el Renault 4, con una carrocería realizada en fibra de vidrio por Michelotti. En 1955 el Alpine A106 vio la luz, poco después Renault se unio a Redelé, apoyando el proyecto. Los motores A106 se realizaron en el taller de Alpine en el distrito 18 de París. Se realizaron dos motores uno de 21 y otro 38 CV. Asimismo, los compradores podían elegir entre dos cajas de cambio: una de 3 marchas, original del Renault 4 y una nueva versión de 5 velocidades que costaba tanto como un Renault 4 Nuevo.