El Ferrari 250 GT SWB fue la antesala del mítico 250 GTO. Presentado en el Salón del automóvil de París en 1959 fue el primer Ferrari en tener frenos de disco y su motor V12 estaba totalmente rehecho, las bujías recolocadas , los muelles y las válvulas de admisión ayudaron a que su potencia ascendiera a 280 Cv., el Ferrari más potente fabricado hasta la fecha si obviamos el exclusivo Ferrari 410 Superamerica (340 Cv.). Su rendimiento mostraba su vocación competitiva, acelerando de 0 a 100 Km/h en sólo 6 segundos, y alcanzando los 245 Km/h de velocidad punta. La distancia entre ejes se acortó a 240 cm, mejorando su manejo con respecto a los predecesores de la serie 250.
Las primeras 21 unidades fueron destinadas a la competición, la carrocería era de aleación en lugar de acero, lo que hizo que su peso bajara en 91 Kilos. Logró el cuarto, quinto, sexto y séptimo puesto en las 24 Horas de Le Mans de 1960, sin embargo a pesar de haber obtenido un rendimiento superior al esperado estaba lejos del 250 TR que llegó a completar diez vueltas más. Se trataba de un coche muy compensado, con unas prestaciones brutales, una inmejorable maniobrabilidad y unos potentes frenos.
La versión de Calle conocida como Lusso apareció en 1962, con una carrocería de acero, pero con el capó, la puerta del maletero y las puertas de aleación. Se trata de uno de los Ferrari más elegantes jamás construidos, sus suaves líneas y su frontal alargado diseñado por Pininfarina cautivaron a los más acaudalados de la época entre ellos el actor Steve Mcqueen. El Lusso montaba un motor de 250 Cv. derivado directamente del 250 GT.
Otra versión muy exclusiva a la que debemos hacer referencia es el 250 Spyder California SWB, con carrocería Scaglietti y motor de 280 CV., al igual que en la Berlinetta, derivado del motor Colombo.
Un total de 250 unidades entre SWB de competición, Lusso y Spyder California SWB fueron construidos. El más caro fue un Ferrari 250 SWB California Spider de 1961 de color negro, que se vendió por 7 millones de Euros, tasas incluidas en Mayo de 2008. El SWB de competición ronda los 2 millones de Euros. El Lusso, es el más asequible, a pesar de que el Lusso de Steve Mcqueen superó los 2 millones de Euros, un Lusso, menos glamuroso puede alcanzar los 800.000 €.