Peter Monteverdi ya era un famoso piloto de carreras que había ganado muchas pruebas conduciendo un Fiat, un Porsche o un Ferrari, cuando en 1959 decidió construir su propio coche de carreras. En principio, el coche iba destinado a la Fórmula Junior. Monteverdi llamó a su creación MBM (Monteverdi Basel Motors), el coche funcionó bien, sobre todo contaba con el orgullo de ser el primer automóvil de Formula 1 fabricado integramente en suiza. El MBM se retiró de la competición a raiz de un accidente, Monteverdi se vio muy afectado y decidió dejar las carreras. Dos años después desarrolló un coche de carreras con motor Porsche; tuvo una mala experiencia con él y se pasó a los coches deportivos y los descapotables deportivos.
Sus primeros coches llevaban motores Osca; posteriormente, casi siempre iban movidos por potentes motores Chrysler V-8. Entre 1969 y 1980, este fabricante suizo presentó todos los años un modelo nuevo en el Salón del Automóvil de Ginebra, el modelo más exitoso fue el 375. Solían ser casi siempre cupés y descapotables rápidos, pero también coches todoterreno e incluso un prototipo Range Rover de cuatro puertas, que posteriormente salió a producción con el nombre de Range Rover Monteverdi. Pero sin embargo en el terreno off-road fueron dos los modelos que marcaron la producción de Monteverdi, el Safari de 1976 y el Sahara de 1978, ambos modelos fueron rival del Range Rover, practica mente el único 4x4 de lujo que había en aquella época, por tanto hay que reconocer a Monteverdi no sólo como constructor de coches deportivos, sino también como uno de los pioneros en todoterrenos de lujo. Es difícil saber cuántos coches ha hecho Peter Monteverdi porque éste, que pasó sus últimos años en Marruecos, no sabría decirlo tampoco.
Monteverdi 375 L de 1970
Monteverdi Safari
Monteverdi 450 GTS
Los últimos ejemplares, que eran principalmente coches de pruebas, salieron de su taller en 1980. En 1990 Monteverdi adquirió la escudería de F1 Onyx, sin embargo no pudo hacer frente a las dificultades que ya acarreaba la compañía y sólo pudo disputar 10 de los 16 Grandes Premios del Mundial de 1990. En el Salón del Automóvil de Ginebra de 1992, Monteverdi puso un pequeño stand: en él expuso un coche deportivo de color púrpura pálido, llamado el Hai F1, del que, según él, se vendieron cinco ejemplares.
Fte de las imágenes: http://www.madle.org