Finalmente Porsche se ha decidido a lanzar en este 2009 el Panamera. Entre su gama uno muy especial, la versión turbo que equipa un motor V8 Biturbo de 4,6 litros. Porsche está pasando unos malos momentos, la crisis económica se está llevando por delante, tal y como ocurrió en 1993 a la marca alemana, y no queda otra que reinventarse. Como ya ocurriera con el Cayenne, los puristas no lo han visto con buenos ojos, pero la historia de Porsche esta llena de modelos rechazados por los puristas, desde el 924 "Baby Porsche", hasta el ya citado Cayenne. Está más que clara la vocación comercial del Panamera, hasta el punto de haber sido presentado en el Salón del Automóvil de Shangai, abriendo nuevos mercados que pueden proporcionar el balón de oxígeno necesario para la marca en estos momentos de dificultad.
El Nombre de Panamera proviene de la carrera de resistencia "Panamericana", quizás la más dura del mundo, que atraviesa el continente americano de Norte a Sur. En los años cincuenta Porsche obtuvo gran éxito en la misma con un Porsche 550 Spyder. Este significado de dureza y fuerza se refleja en el Panmera Turbo.
El diseño del Panamera está emparentada directamente con la familia 911, tanto en su frontal como en su trasera. Su diseño es musculoso, la curva es la protagonista, desde su frontal hasta la caída del parabrisas trasero. A diferencias de las grandes berlinas deportivas existentes en el mercado, el Panamera apenas tiene cajon de maletero, a pesar de montar el motor delante, se ha querido mantener el espíritu del 911. En la Web de Porsche podemos leer un interesante artículo donde de hacer referencia a un Porsche 928 de cuatro puertas diseñado en 1987, su línea se acerca más a un Station Wagon que a una berlina, afortunadamente no es el caso, el Panamera se acerca más al diseño de la berlina-coupé, similar al Mercedes CLS.
Su interior promete exclusividad y deportividad. Si algo concluyen todas las pruebas realizadas por revistas especializadas, es que la sensación se acerca más a la de conducir un 911 Turbo que una berlina. El motor es un 4,6 litros V8 Biturbo, que lleva a los 303 Km/h al Panamera, un autentico salón rodante. El precio esta fijado en poco más de 150.000 €, lo que lo convierte en una de las berlinas más caras del planeta.
El Nombre de Panamera proviene de la carrera de resistencia "Panamericana", quizás la más dura del mundo, que atraviesa el continente americano de Norte a Sur. En los años cincuenta Porsche obtuvo gran éxito en la misma con un Porsche 550 Spyder. Este significado de dureza y fuerza se refleja en el Panmera Turbo.
El diseño del Panamera está emparentada directamente con la familia 911, tanto en su frontal como en su trasera. Su diseño es musculoso, la curva es la protagonista, desde su frontal hasta la caída del parabrisas trasero. A diferencias de las grandes berlinas deportivas existentes en el mercado, el Panamera apenas tiene cajon de maletero, a pesar de montar el motor delante, se ha querido mantener el espíritu del 911. En la Web de Porsche podemos leer un interesante artículo donde de hacer referencia a un Porsche 928 de cuatro puertas diseñado en 1987, su línea se acerca más a un Station Wagon que a una berlina, afortunadamente no es el caso, el Panamera se acerca más al diseño de la berlina-coupé, similar al Mercedes CLS.
Su interior promete exclusividad y deportividad. Si algo concluyen todas las pruebas realizadas por revistas especializadas, es que la sensación se acerca más a la de conducir un 911 Turbo que una berlina. El motor es un 4,6 litros V8 Biturbo, que lleva a los 303 Km/h al Panamera, un autentico salón rodante. El precio esta fijado en poco más de 150.000 €, lo que lo convierte en una de las berlinas más caras del planeta.
Imágenes procedentes de Porsche AG
